Solemos escuchar corrientemente fuertes cuestionamientos a los legisladores, ya sea por incumplimiento, por los altos sueldos o el dinero que manejan; muy pocas veces se habla de las responsabilidades y obligaciones. Yo creo que las recientes jornadas legislativas nacionales, tanto en el senado como en diputados deben ser consideradas históricas y reivindican el accionar de la mayoría de los representantes del pueblo, sean ellos oficialistas u opositores.
Es que el debate, o exposición, para la recuperación por parte del Estado de la administración de YPF tuvo picos altísimos de pasión, de oratoria y de compromiso histórico e ideológico. Tanto de un lado como del otro; y como muestra basta escuchar las exposiciones del radical Gil Lavedra o la apasionada fundamentación del Presidente de la bancada oficialista Agustín Rossi.
Párrafo aparte para las barras, que dieron un marco de colorido militante que le hace muy bien a la política argentina, aunque cierta desmesura motivó el reto del presidente del cuerpo Julián Domínguez.
No obstante ello y a pesar de esos detalles, se desarrolló todo en un clima de encendido sentimiento patriótico, necesario para reivindicar ideales y pasiones que hacen a nuestra identidad sin caer en especulaciones patrioteras.
YPF es como Malvinas, forma parte de nuestro ADN por eso la iniciativa presidencial fue acompañada por una amplia mayoría de legisladores que votaron a favor en general, más allá de cuestionamientos puntuales dignos de ser escuchados.
YPF es la patria, Mosconi recupera su descanso en paz.
Escribe:
Prof. Daniel Lombardo