Los negocios se ven con muy poca gente, las quejas sobre un «parate» importante se escuchan, y por lo tanto quisimos saber.
Nos dicen que el rubro inmobiliario está muy parado, que hay pocas operaciones, que hay gente que incluso cuenta con fondos y se ha retraído, y que el tema del dólar también ha enfriado el sector. En cuanto a los automotores la baja en las ventas de 0 km. es notoria y va acompañada con una merma en los usados. Decían en un banco local que los créditos para automotores han bajado en más del 50%. «La gente no pide, es como si tuviera miedo», nos decían en un banco privado. En cuanto al comercio no le iría en saga, algunos están casi desiertos, la gente compra solo lo necesario, también las bajas son importantes.
En cuanto a las causas estas son varias. Dicen que en esta época del año suele ser común el parate, que la gente se posiciona para las fiestas y los gastos extras que deben realizar. Otros en cambio le atribuyen la merma a las inundaciones, y no son pocos los que aseguran que la economía ha caído «que ya no sos mi margarita», como era meses atrás.
Los más optimistas sostienen que la clase media alta está muy posicionada, con resto y puede ser que haya frenado un poco sus gastos, pero nada indica que haya alguna luz roja encendida. Se ve mucho movimiento de autos, las confiterías llenas, el sector de clase media baja gasta en motos, electrónicos y salidas.
Tal vez el venir de tanta bonanza el que se haya frenado todo un poco les causa pánico. Habrá que esperar meses claves como diciembre y enero que son el verdadero termómetro de la economía.