No se trata de una ordenanza menor. El estacionamiento medido implica un cambio de hábitos, en una comunidad que parecía estar muy lejos de esa realidad que ya es norma en grandes y hasta en pequeñas ciudades como la nuestra.
Costará al principio. Algunos vecinos se resistirán a pagar por dejar estacionado su vehículo en la vía pública, pero es evidente que la saturación de vehículos que sufre el radio céntrico de la ciudad en horas de mayor movimiento comercial y bancario, hacen necesaria una medida que permita descongestionar dicho estacionamiento.
Sabido es que empleados de banco, de comercio y de distintas oficinas van en sus vehículos a trabajar y los dejan estacionados muchas horas, no permitiendo de esa manera el recambio necesario. El tener que pagar una tarifa horaria por estacionar desalentará a muchos, los que intentarán dejar sus vehículos en lugares más alejados, donde no se encuentre implementado el estacionamiento medido. De igual manera se comportarán aquellos que pasan varias horas en bares y confiterías o deban realizar largos trámites en oficinas o entes oficiales y analicen si les conviene el costo que les representará el estacionamiento medido.
Es probable que una vez puesta en funcionamiento la ordenanza, sea perfectible de modificaciones, ya que no se sabe hasta que punto pueden verse perjudicadas calles también céntricas que no se encuentran comprendidas en el estacionamiento tarifado, tal el caso de calle Las Heras y probablemente algunas perpendiculares.
La implementación de dicha medida ha sufrido alguna dilación en virtud de que presenta alguna complejidad el hallar una institución benéfica que se haga cargo de su instrumentación, habida cuenta de que deben disponer de personal idóneo para control y también de administración.
En nuestra anterior edición adelantamos que dicho trabajo le fue ofrecido al Cuerpo de Bomberos Voluntarios, institución esta que estaría capacitada para realizarlo, la que lo tiene en estudio a fin de establecer si realmente la ecuación costo-beneficio les es satisfactoria.
Todo hace prever que para principios de año el estacionamiento medido en el radio céntrico de la ciudad estará en funcionamiento. Habrá que armarse de paciencia, tolerancia y predisposición para aceptar que los cambios que produce la vida moderna, llevan implícitas molestias ciudadanas que además tocan el bolsillo, que como se dice, es el órgano más sensible de todos…