Venía la onda verde del intendente Torchio, que usa para su gestión como color insignia el verde, y ya lo explicó por qué. Pero el efecto Francisco, el papa argentino parece que influenció en él y pintó los bordes de todos los caminitos de la plaza, color obispo. Créase o no WT resignó el verde al menos en la plaza, por lo que ahora se desconoce con qué color seguirá pintando sus obras. Lo que importa en realidad no es el color que se pinten, sino que se ven bien prolijas y no descascaradas como estaban.