Se trata del tradicional narguile, al que también en América se le dice «cachimba», y es un dispositivo en el que se fuman hierbas de distintos sabores (por lo general no es droga). Es de origen musulmán, se fuma mucho en oriente y ahora se ha puesto en América, especialmente en países del caribe. Las hay de cristal, oro, coca y hasta caseras
Una novedad en Casares que han traído chicas dominicanas afincadas en nuestra aldea, que fuman en los lugares de esparcimiento y lo hacen con snobismo, convirtiéndose en el centro de las miradas. Algunos les piden «una pitada» y ellas generosas lo dan a probar. Todos coinciden en que sabe a rico, pero -repetimos- para que nadie tenga una idea equivocada, que no se trata de droga. Por lo general se usa con tabaco aromatizado o común al que se le agregan miel y otros aditivos dulces. Los musulmanes lo usan para reunirse a conversar y fumar, suele vérselos sentados en el suelo a manera de mesa de café. Se dice que es más dañino que el tabaco, contra lo que creen aquellos que la fuman asegurando «que no hace nada».