En el juicio oral que se le siguiera a Jorge Carbone, el falso abogado al que se le imputan los delitos de Usurpación de Títulos y Honores y Estafas Reiteradas en perjuicio de por lo menos una docena de víctimas que confiaron en él como abogado y resultaron engañados y muchos de ellos despojados de sumas de dinero.
SE DESCOMPUSO
En una de las audiencias, uno de los testigos convocados, de apellido Suárez, se sacó de la indignación y le gritaba a Carbone «Mirame a los ojos, hijo de puta!», y le echaba a viva voz y completamente desencajado el engaño del que fuera víctima. Esas palabras, la tensión y el clima de la sala hicieron que Carbone se descompensara y fuera retirado pidiendo expresamente no comparecer en las próximas audiencias. En realidad todos los testigos convocados porque fueron estafados con engaños por el acusado, se sentían de igual forma, aunque lograron sobreponerse quedándose con las ganas de imitar a Suárez.
El próximo jueves tendrá la última audiencia con la comparencia de un testigo rebelde al que se lo hace comparecer con la fuerza pública. La otra semana tendrán lugar los alegatos y días después se dictará la sentencia