No falta demasiado, apenas unos 70 días para que tenga lugar la XII Fiesta Nacional del Girasol, programada para los días 10,11 y 12 de enero del año venidero. Una fiesta que como ya lo ha mencionado su presidente Carlos Cerdá, se hace a destiempo, ya que tiene lugar después de la siembra, cuando en realidad debe realizarse más adelante, en marzo y abril.
Pero no es de eso de lo que queremos hablar. Mencionándolo a Cerdá recordamos que en una conversación de días atrás cuando refiriéndose a la fiesta y a su trabajo al frente de la misma nos dijo: «recuerdo sus editoriales en las cuales se hacía mención a que el girasol estaba ausente en la fiesta, la que sólo se resumía a un concurso de belleza y a la actuación de grupos musicales. Estoy en un todo de acuerdo con esa línea de pensamiento, y convencido que el girasol debe estar presente en la fiesta, ser la verdadera estrella de la misma».
Precisamente desde esta sección de opinión hemos sido críticos de la falta de simbología girasolera de las últimas fiestas, titulando alguna nota «EL GIRASOL AUSENTE», haciendo mención a que el leitmotiv de la celebración, que era el girasol se veía tan solo en alguna imagen del palco central o de los trípicos del programa de festejos. Ya prácticamente no tenían lugar ni concursos, ni mesas redondas sobre la aleaginosa, tampoco disertaciones, ni vidrieras alusivas, quedando la fiesta solo reservada al concurso de belleza, a la actuación de números musicales y pare de contar. Ni siquiera en la feria montada en la plaza se respetaba la tradición, el trabajo artesanal y la muestra de las habilidades locales, para dar lugar a un verdadero mercado persa con venta de chafalonías, mercadería trucha, venta de alimentos de dudosa procedencia, todo en competencia desleal con el comercio local, y el espectáculo deplorable de los feriantes durmiendo en la plaza y haciendo sus necesidades también, mostrando una cara desagradable que ningún vecino quería ver.
Parece que la nueva comisión tiene intenciones de modificar todo eso, de darle a la Fiesta del Girasol su verdadera significación, y próximamente trasladarla a la fecha dispuesta por su decreto de creación.
Sabemos que en tan poco tiempo no podrán lograrlo todo, pero es esencial que lo tengan presente, que le devuelvan a la fiesta su verdadera significación.