Joven, muy joven aún, Gisella Luján Menéndez, madre de 4 hijos, dejó de existir en el hospital Dr. José Penna de Bahía Blanca, hacia donde había sido derivada del hospital local, donde había ingresado con la rotura de una aneurisma cerebral. Nuestros lectores se enteraron de la situación a raíz del peregrinar que tuvo la ambulancia para llegar a Bahía Blanca, fruto de una equivocación de su chofer, pese a que ya había hecho ese trayecto con anterioridad. En ese viaje de urgencia, que se demoró varias horas más por el problema aludido,
Gisella Menéndez era acompañada por la Dra. Adriana Sívori y la enfermera Laura Deluchi. Se sabe que llegó muy grave a Bahía Blanca, que poco faltó para que falleciera en el camino. También viajaba en la ambulancia el esposo de la enferma, Juan Ariel Prado.
Como consecuencias de la demora en el viaje se les terminó el oxígeno, por lo que le bombeaban oxigeno en forma manual para que pudiera respirar. Gisella fue intervenida quirúrgicamente para descomprimirle el cerebro, y debía ser operada nuevamente pero una complicación (neumonía) hizo que se postergara dicha intervención. Si bien no estamos en condiciones de precisar la causa de su fallecimiento, todo indicaría que sufrió un nuevo agravamiento en su estado y nada pudo hacerse.
Gisella trabajó un tiempo en pizzería Roma pero dejó de hacerlo en el mes de octubre de 2013, ya que padecía fuertes dolores de cabeza. No obstante tuvo otros trabajos, ya que su hogar era muy humilde, había que alimentar a sus cuatro hijos, por lo que ambos esposos debían trabajar. Se sabe que su familia está muy conmocionada por su temprana desaparición, a la par que no pueden ocultar su indignación por lo sucedido en su traslado.