En nuestra anterior edición al referirnos al sistema de Estacionamiento Medido que será implantado en el mes de abril en la zona céntrica, no especificamos si será la comuna o alguna institución la que se hará cargo de su cobro y administración. Se nos informó que al menos al comienzo será la comuna la encargada del cobro, el que se hará manual, como se hace en ciudades vecinas, para luego ir implementándose un sistema más ágil, moderno y seguro, que contemplará incluso el pago a través de teléfonos celulares, tal como acaba de implementarse en Junín. Una vez cubiertos todos los gastos que demande su aplicación, se destinará el excedente a instituciones relacionadas con la discapacidad. Eso es al menos lo que se nos informó en forma extraoficial, ya que todavía pueden surgir algunas modificaciones en su implementación.
Es de destacar que en mesas de café, también entre «damnificados» y «favorecidos» y en todos los ámbitos de la ciudad, se habla del inminente «Estacionamiento Medido» , haciéndose todo tipo de comentarios al respecto. Incluso hasta no faltan los que preguntan si la chatarra de autos chocados que pone la policía en la calle de la plaza, deberán pagar estacionamiento…
Y entre los que se niegan a la medida, alguien que añora el Casares antiguo con argollas en la veredas para estacionamiento de sulkys y charrets, le decía a un cronista de este medio: «Ustedes que dicen que son el libro de quejas de la población, van a tener que dedicarle un par de páginas en cada diario para las quejas de los vecinos…»
El Casares de antaño, aquel al que se refiere dicho vecino, ya es historia, las modas, la tecnología y los adelantos suelen provocar en aquellos vecinos de la «guardia vieja» ciertas resistencias. Pero no se puede ir contra la corriente, bien dice el conocido y «moderno» refrán: «cocodrilo que se duerme, es cartera…».