«El periodismo es una pasión insaciable que sólo puede digerirse y humanizarse por su confrontacion descarnada con la realidad»
Con estas palabras, escritas por Gabriel García Marques, el Honorable Concejo Deliberante de Carlos Casares, con la firma de sus autoridades, saluda a El Oeste con motivo de celebrarse precisamente hoy el 86º aniversario de su fundación.
Y sí, el periodismo como bien dijera ese genial escritor colombiano, acaso una de las máximas plumas de América, es una pasión insaciable, una vocación incurable, que sólo aquel que lo siente y lo practica puede entenderlo, y muy dificilmente explicarlo.
86 años contando la historia casarense, siempre apoyados por una masa de lectores y anunciantes que ha fluctuado y se ha renovado constantemente por varias generaciones, nos demuestran que no hemos equivocado el camino, que seguimos en la misma senda pero a caballo de los tiempos, realizando siempre una confrontación descarnada con la realidad, comprometidos con nuestra misión de informar, esclavos de la veracidad, concientes que somos un puente entre esa realidad y nuestros lectores.
En tiempos de la era digital, derrumbando vaticinios que aseguraban la pronta desaparición de los medios de papel, El Oeste continúa más vivo que nunca, arropado por el apoyo de miles de lectores, que buscan en sus páginas el sabor de esa pasión insaciable traducida en su estilo y en su contenido.
Vaya nuestro homenaje a esos visionarios que lo fundaron, también a los que año a año lo fueron enriqueciendo con su impronta, sin dejar jamás de sostener los postulados que lo dieron a luz.
Los que hoy estamos llevamos una pesada carga sobre nuestros hombros, pero la sangre que corre por nuestras venas es la misma que la de aquellos soñadores que lo crearon, como lo son sus mismos ideales, a los que no renunciaremos jamás.
Es un cumpleaños más, sin torta, ni velitas, pero con la llama encendida, cual una ofrenda votiva de continuar sin desmayos en nuestra sagrada misión de informar y de ejercer el derecho responsable de opinar, y abrir nuestras páginas a la comunidad, como una tribuna de expresión que permita amplificar sus ideas y pensamientos.