Si nuestros abuelos, bisabuelos o tatarabuelos cuando vinieron a estas pampas en lugar de continuar viaje hasta Carlitos Casares en lugar de quedarse en Capital, zonas aledañas o al menos no pasar de Chivilcoy, en algunos años más sus descendientes podríamos disfrutar de una autopista hasta Buenos Aires. En cambio ahora deberemos conformarnos con llegar hasta Chivilcoy por una ruta angosta y maldita sembrada de muertes, que para colmo está hecha pedazos, porque la famosa y promocionada AUTOVÍA LUJÁN – CARLOS CASARES ha sido eliminada del calendario de obras por los próximos 100 años. «Hubo una adecuación contractual», dicen los que están en el tema, por lo que la concesión de la mentirosa autovía, sólo se concretará, si es que se concreta, en el tramo Mercedes – Chivilcoy. La concesionaria H5 SA presentó el proyecto de obra a Vialidad Nacional, estimándose que en 30 días será aprobado. La obra -dicen- demandará 30 meses.
Una nueva frustración de las tantas que tenemos no sólo los casarenses sino todos los habitantes al sur de Chivilcoy, por donde parece no pasar Dios, y si pasa -como todos dicen- atiende en Capital.
Si alguna vez pensamos que ibamos a ver una imagen similar en la ruta 5 de Chivilcoy a Casares, las últimas noticias nos dicen que nos han engañado.