Un un mundo dominado por la individualidad, los intereses personales, la escasa solidaridad y la continua confrontación de ideas, los casarenses debemos evitar el contagio y mostrar una cara positiva que nos permita crecer y desarrollarnos en el logro de objetivos comunes.
Desde la sensatez es inaceptable que pueda existir una puja de intereses, cuando precisamente las partes persiguen los mismos objetivos. Nos referimos a la creación de un Centro de Nefrología y Diálisis como parte del sistema de salud local, la que ha dado lugar a una confrontación entre partes, cuando en realidad tendrían que estar unidas a fin de poder hacer realidad en el plazo más breve posible una palmaria necesidad en materia de salud pública.
Existe, y por cierto fue hecho público e incluso se esbozó un proyecto a nivel municipal para la creación del centro aludido. Se sabe que se está a la espera de reunir los fondos necesarios para llevarlo a cabo. Paralelamente vecinos afectados por dolencias renales que hacen imprescindible tratamiento de diálisis, y que deben concurrir a distintas localidades con los consiguientes inconvenientes y gastos que ellos significa, hicieron reclamos ante la justicia para la pronta o inmediata puesta en funcionamiento del servicio de referencia.
No vamos a analizar las idas y venidas judiciales ventiladas por las partes, que para los legos en materia legal suelen ser incomprensibles. Como incomprensibles fueron también las explicaciones que pretendieron dar. Si en cambio creemos que tanto esfuerzo de unos y otros para hacer realidad ese objetivo común, debe unir a las partes y JUNTOS buscar la posibilidad de lograr el fin propuesto. Caso contrario estaríamos convirtiendo en abstracto algo que debe ser real y de pronta concreción.
Si el problema pasa por lo económico y la cifra no es astronómica, que por cierto no lo es, unos y otros deben ponerse en marcha a fin de lograr los dineros necesarios, sin dejar afuera a la comunidad en su conjunto, que por cierto es particular interesada en que a nivel comuna se presten los servicios de salud.
¿Por qué no movilizarse en una colecta pública para reunir esos fondos?.
¿Por qué no hacerlo juntos la municipalidad y quienes reclaman ese servicio?.
¿Por qué no sumarse aquellas entidades intermedias que se unen al reclamo?
Desde este medio ofrecemos nuestra más amplia colaboración en forma totalmente gratuita, y a su vez expresamos nuestro deseo de sumarnos al aporte económico que cada vecino pueda realizar en base a sus posibilidades.
Malgastar energías en una contienda inútil sólo dilatará la situación. Hay que poner manos a la obra desde la realidad, nadie está libre de necesitar el día de mañana lo que hoy están necesitando otros vecinos. Si el tema es económico y nos atañe a todos, ¿qué estamos esperando para sumarnos a su concreción?.