Si en algo ha sobresalido el gobierno comunal actual, es en valorar y considerar a todos aquellos que por sus capacidades diferentes encuentran todo tipo de obstáculos en la vida. Largo sería de enumerar la obra municipal en ese aspecto, ya sea desde el punto de vista cultural, como deportivo y educativo, sin olvidar a aquellos que por tener discapacidades motrices, ven dificultado su tránsito por la vía pública, el ingreso a los edificios públicos, en fin, intentar de todas formas posibles hacerles la vida más fácil y que no se sientan de manera alguna discriminados. Y en eso -lo repetimos- el gobierno comunal merece un reconocimiento.
Pero no todo está hecho, seguramente habrá mucho por hacer en ese aspecto, y eso se ha puesto de manifiesto precisamente hace escasos días en oportunidad de celebrarse el acto de entrega de 82 jubilaciones a vecinos de nuestra ciudad. No eran ellos personas con discapacidades motrices, pero si en cambio gente de edad avanzada, algunos o la mayoría sobrellevando los achaques de la tercera edad, que apenas si podían subir uno a uno y con cierta agitación, los escalones que llevan al piso alto municipal, que no son pocos.
Y eso dio pie a nuestro cronista allí destacado, a que un poco en broma un poco en serio, le sugiriera al intendente Torchio, que aprovechando la presencia en ese lugar de los directivos de la ANSES, gestionara con ellos un subsidio para colocar en las escalinatas centrales una silla mecánica sube escaleras o mejor una plataforma eléctrica para personas y sillas de ruedas.
¿Se les pasó?, tal vez no, y si no se hizo será por cuestiones de costo u otras, pero a la casa del pueblo que es la comuna y esencialmente al despacho del Intendente Municipal, deben poder llegar todos los vecinos de Carlos Casares. Y más aún si se pretende que el Salón Blanco está habilitado para todos los casarenses.
Trasladamos entonces y seriamente la sugerencia de nuestro cronista, para que en breve si es posible, las pomposas escaleras del Palacio Municipal, puedan ser subidas por aquellas personas que tienen impedimentos para hacerlo. Ese tipo de sillas o rampas, no son una rareza, en la actualidad se observan en shopings, tiendas, oficinas públicas y distintos edificios, tal vez no en las ciudades pequeñas como la nuestra, lo que no significa que no podamos ser precursores en ese aspecto.
Tome nota Sr. Intendente: esa importante obra debe ser incluida en su proyecto de gobierno.