Una profunda conmoción provocó, hace poco más de 30 días, la noticia del fallecimiento de un niño a causa de la ingesta de purpurina, motivando una luz de alarma sobre lo que los chicos manipulan habitualmente.
La semana pasada, otro hecho trágico y de similares características en cuanto a lo poco habitual del mismo, ocurrió en la localidad de Dudignac, partido de 9 de Julio, a raiz del fallecimiento de una menor de 12 años.
El hecho en si no deja de llamar la atención, por cuanto la niña, Luisina Basualdo, de 12 años, tenía afición por los perfumes, a raiz de lo cual había rociado su almohada con gran cantidad de perfume, acostándose sobre ella, provocándole una reacción sistémica que la condujo a una prematura muerte.
Otra muerte absurda, impensada, que llama a reflexionar sobre las cosas que manipulan especialmente los niños y de la manera que lo hacen, ya que elementos que parecieran inofensivos pueden transformarse en mortales de acuerdo a su uso. Fuente: diario Tiempo de 9 de Julio.