VÍA CHULENGO
La Avda. San Martín (le pedimos disculpas al General) para la Fiesta del Girasol la hemos rebautizado con el nombre de VÍA CHULENGO, por la cantidad de kioscos que encendieron noche a noche sus chulengos vendiendo sandwiches de chorizos, de bondiola, panchos de todas las medidas, pizzas, lomitos y variedades, tacos mejicanos, rabas, papas fritas y fritangas de todo tipo, en una mescolanza de sabores y olores que nadie sabía lo que comía. Unos le echaban mayonesa a los chorizos, otros mostaza a las rabas y algunos comían los tacos mejicanos con chimichurri.
PARA LOS CHICOS JUEGOS GRATIS
Aplausos para TEHUACÁN que en su espacio gratuito para chicos tuvo continuamente llenos de bulliciosos niños su sector de juegos inflables. Sin aspirar a ganancia alguna y tampoco publicidad, la firma de insumos agropecuarios, sumó de esa manera su aporte para con la realización de la fiesta.
CUCHILLOS DE PLÁSTICO POR FAVOR…
El calor, las aglomeraciones y a veces el mal carácter de la gente, son causal de roces, discusiones y peleas, algunas de las cuales terminan mal. Precisamente una pelea en un lugar gastronómico de la Avda. San Martín terminó con uno de los contendientes herido de una cuchillada, al parecer con un símil tramontina dentado.
Es aconsejable por lo tanto, que los dueños de los comederos para la próxima fiesta pongan cubiertos de plástico…
CUMPLIÓ AL PIE DE LA LETRA LA PROHIBICIÓN DE VENDER ALCOHOL
En uno de los stand de la plaza por 10 pesitos te daban cinco argollas para que intentes embocarlas en los picos de botellas de whisky, vodka y otros licores. Misión imposible, nadie lograba embocar una argolla. Cuando se le quejaron al dueño del stand, éste dijo: «Y… más vale que es imposible acertar, no sabés que no se puede expender alcohol en los stands?».
NO HUBO NOCHE DEL FOLKLORE, PERO FABIANA SORIA SE PUSO LAS BOTAS
En esta Fiesta cono supo haberla en otras, no hubo noche del folklore. Un concurrente despistado pensó que si había, al verla a Fabiana Soria, la atractiva dueña de Puppies con las botas puestas.
Es que en realidad trabajó tanto su cantina, que Fabiana se puso las botas…
BAÑOS QUÍMICOS O CABINA DE TELÉFONO…
Por momentos en el lugar donde estaban colocados los baños químicos había cola. De pronto una mujer grande comenzó a golpear la puerta de uno de los baños, exigiendo que salga a quién lo ocupaba. Salió una jovencita muy nerviosa con el celular en la mano, y la mujer le dijo: «¿Qué te crees… que es una cabina telefónica que te metés en el baño para hablar 10 minutos?».