«No se pueden buscar excusas y culpables sin pruebas», dice enojado Bernardo Grobocopatel.
El partido de fútbol que se jugara el sábado en el estadio de Agropecuario Argentino ante América de Gral Pirán, trajo cola. Se sabía por el desenlace del partido y sus circunstancias «que iba a traer cola». El eje del conflicto que estallara a nivel del equipo que se fue perdedor y que se trasladó no sólo a las redes sociales, que hervían, por así decirlo, sino también en medios periodísticos de la zona y especializados. Todo por «el penal de la discordía» como podría llamárselo al penal con el que Agropecuario logró en el último minuto del partido en tiempo de descuento acceder a la definición por penales, en la que resultó vencedor, logrando así su paso a la semifinal del torneo «Argentino B».
QUE LA TERNA ARBITRAL COBRÓ $ 40.000.-
El presidente de América de Gral Pirán, Juan Carlos Aguinaga, rápido de reflejos, sembró dudas, realizó graves acusaciones de soborno y denunció ante el Consejo Federal de la AFA un hecho que llamó «inmoral» por parte de la terna arbitral, en lo que consideró un hecho espurio la sanción de un penal «inexistente» a los 49 minutos de juego del segundo tiempo. Distintos medios como La Opinión de Trenque Lauquen, Todo Ascenso (especializado) y otros ponen en boca de Aguinaga que la terna arbitral cobró $ 40.000 para perjudicar a su equipo, denunciando lisa y llanamente un hecho delictivo, y refuerza su temeraria afirmación, haciendo pública una foto en la que se ve al línea Darío Felipe, que fue el que señaló el penal, junto y abrazado a los jugadores de Agropecuario esa misma noche del sábado tomando unas copas en la bailable Sin City, muy sonriente. «Eso los condena» expresó el presidente de América que habría reclamado el partido al Consejo Federal de la AFA.
GROBOCOPATEL REPLICA ENOJADO
«Que se dejen de buscar excusas y presenten pruebas» dijo enojado el dueño de Agropecuario, Bernardo Grobocopatel en su sitio de Facebook, estimando que es mucho más grave que sus jugadores hayan salido de juerga tres días antes de un partido decisivo y se hagan los cómicos en las fotografías exhibiéndose tomando unas cervezas o tragos como se ve en la foto.
NO ES FÁCIL PROBAR LAS ACUSACIONES
Tras la denuncia, las declaraciones y las actuaciones que pudiera realizar el Consejo Federal, difícilmente pase nada. Probar un soborno a menos que se tengan pruebas fehacientes y válidas es sumamente difícil. La foto puede alimentar suspicacias pero nada más, no prueba nada. Los arreglos, si se hacen, pasan por la cúpula, los jugadores ni noción.
Todo esto sumará un ingrediente más para el escándalo habitual al que nos tiene acostumbrado el fútbol, sea por la violencia, las barras bravas, las sospechas, lo que fuere, cada vez los intereses son mayores y el ambiente se vuelve más denso.