El ingenio del dibujante creó esta imagen, que al derecho es una rana, o tal vez un sapo, probablemente la imagen que tu querida y nunca bien ponderada mujer tiene de vos, pero si la das vuelta podrás comprobar que esa es tu verdadera imagen, la de un brioso corcel (acaso padrillo?) que todavía se puede anotar en los mejores clásicos…
(tomada de Facebook).