Mauricio Macri, líder del Pro y ex-intendente de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, coronó su sueño más preciado. A partir del próximo 10 de diciembre ejercerá la Presidencia de la Nación, poniendo así fin la etapa kirchnerista (2003-2015), como referente de Cambiemos, una alianza entre el Pro y el radicalismo, que se impuso en ajustado margen al Frente para la Victoria liderado por Daniel Scioli, 51.4% a 48.6%, una diferencia de poco más de 2 puntos, que no fue cuestionada por los perdedores, sino por el contrario aceptada por Scioli en su discurso al promediar el escrutinio.
NUEVAMENTE FRACASARON LAS ENCUESTAS
Lo sucedido marca también el ocaso de las encuestadoras, referentes falsos de hipotéticos resultados que no se dieron, ni en la segunda vuelta ni en el balotage. Unas pronosticaban 6 puntos, otras 10 puntos y las más osadas hasta 12 puntos a favor de Macri. Lejos estuvo de ser esa la realidad.
EL CAMBIO
El proyecto y la filosofía del macrismo y sus aliados fue el cambio, ya sea de estilos, de la manera de hacer política como en los tópicos que más interesan a los argentinos: seguridad, economía, tratamiento del narcotráfico, salud, bienestar social, etc. El tiempo dirá si ese proyecto que fue bandera de campaña es desarrollado con éxito. Respecto a las conquistas del gobierno que se va, muchas de ellas incuestiona-bles y fundamentales, habría un compromiso del nuevo gobierno que se avecina de no tocarlas, pero eso también se verá, tal vez contemplando a ese casi 49% que creyó en el gobierno anterior, no se modifiquen demasiado. El tiempo lo dirá, hay que dejar que Macri y sus aliados gobiernen, sin ponerles palos en la rueda, porque apostar al fracaso no tiene sentido, el país no se puede dar ese lujo.
JUBILO DE LOS PARTIDARIOS DEL PRO EN CASARES
El triunfo de Macri sobre Scioli en nuestro partido fue demoledor, 62% a 38% eximen de todo comentario, aquí Macri también fue el claro elegido.
Si bien se preveía, muy pocos cálculos acertaron el resultado de las elecciones Balotage en Carlos Casares. El triunfo de Macri fue arrollador, 9.144 votos sobre 5.636 de Scioli demuestran que los casarenses también querían un cambio respecto al gobierno nacional.
Muchos auguran que al intendente Torchio le será difícil gestionar con un gobierno provincial y nacional de otro palo. Todo dependerá de la actitud que asuman en ese aspecto la gobernadora Vidal y el presidente Macri, ya que seguramente no se les deberá pasar por alto que aquí en Casares ambos ganaron. Si perjudican la gestión de Torchio estarían perjudicando a quienes los votaron. Sería como escupir para arriba. Y como Menem lo dijo, está visto que ninguno de los dos come vidrio…