Si hasta parece una falta de respeto a todos los esfuerzos que se han realizado para lograr que el paseo céntrico por excelencia de la ciudad, que es la Plaza San Martín y sus adyacencias, se convierta en lugar de reunión, encuentro y esparcimiento de los casarenses.
Esa falta de respeto tiene que ver con la acumulación de chatarra (autos y camionetas chocados, volcados o secuestrados) producto de accidentes o actos delictivos, los que son depositados allí, no sabemos si por decisión policial u orden judicial, que por cierto poco importa, ya que el efecto no deja de ser el mismo.
Los casarenses no tenemos por qué soportar esa polución visual que significa toda esa exposición de autos secuestrados que suelen estar meses en algunos casos, juntando suciedad y llenándose de desperdicios.
Es una historia de nunca acabar. Son incontables las notas que hemos hecho pidiendo que ya sean las autoridades policiales o judiciales dispongan de un predio en el cual albergar esas unidades, en lugar de elegir la plaza municipal para esos fines. Se nos ha dicho que alguna vez existió un depósito para esos vehículos (al costado del cementerio israelita), pero que autores anónimos (que no fueron tales) les robaban sus cubiertas y distintos elementos que podrían serles útiles para sus propios vehículos o bien para su venta. Incluso en aquella oportunidad hubo hasta algún policía imputado en ese tipo de delitos. Habrá que poner vigilancia, responsabilizarlos del inventario o lo que fuere, pero buscarle una solución, sacando de allí cuanto antes esos vehículos ya que ese tipo de excusas sólo justifican algo que está mal a todas luces y debe ser corregido.
Una parte de los autos secuestrados que «adornan» el principal paseo público.