El miércoles, víctima de una prolongada enfermedad, dejó de existir en su domicilio la conocida vecina Carmen Leonor Rossi de De Marco, a la edad de 75 años. La extinta era tronco de una numerosa familia, que hoy llora amargamente su partida. Una mujer que se distinguía por su trato amable, simpática y afectuosa, que supo conquistar numerosas amistades y ganarse el aprecio de quienes la trataban. En su despedida lamentablemente no pudo estar su hijo Norberto, recluido en la cárcel de Urdampilleta purgando una condena de Cadena Perpetua por un hecho que todos conocemos. La fiscalía había autorizado su traslado a ésta para que pudiera estar presente en los actos del sepelio e inhumación de los restos de su madre, pero inconvenientes en el servicio penitenciario impidieron su traslado, el que se realizará en los próximos días para que pueda visitar la tumba de su progenitora.
Dios le conceda a esa sufrida madre la paz y el descanso eterno. Nuestras condolencias.