La oposición dividida puede sumar más que un rejunte sin coincidencias ideológicas ni programáticas

0

Si bien es cierto que a los fines políticos la división producida en el bloque opositor de Cambiemos puede ser funcional al gobierno oficialista del intendente Torchio, en lo que hace al verdadero rol opositor que deben tener los representantes del pueblo en el Concejo Deliberante, le conviene fundamentalmente a la comunidad, habida cuenta de que cada uno de los bloques cumplirá su función de control sin estar amañados a alianzas que más que juntarlos los amontonan, en debates internos sin coincidencias ni ideológicas ni programáticas, con conceptos diametralmente opuestos en lo que hace a la forma de hacer política.

Es palpable que luego de la división, ambas fracciones, la 8 de Enero liderada por el senador Omar Foglia recientemente escindida y la de Cambiemos, cuyo referente es Jorge Zabala, aliado a la UCR (Ponono Quintana) se sienten más cómodos, sin necesidad de agotarse en acordar y libres de responder a intereses que son propios, aunque haya sectores del radicalismo que no comulgan con el estilo de gobierno y los intereses de sus socios mayoritarios.

Conversando con integrantes del bloque 8 de Enero, estos nos decían que aportando la mayoría de la fuerza opositora (cinco concejales) se sentían encorcetados en un acuerdo que les impedía expresarse de acuerdo a los postulados de su propia agrupación. «Ahora podemos desarrollar nuestro verdadero rol político, sin depender de bajadas de línea o cuidar los acuerdos realizados».

Con un gobierno que llegó al poder con el 64% de los votos, es absolutamente necesaria una oposición coherente que controle y evite los desvíos hegemónicos que puedan llevar a políticas caprichosas basadas en el poder de la mayoría. Si esa oposición está agrupada en una diversidad que no encuentra puntos de coincidencia internos, su poder se verá amenguado perdiendo no sólo efectividad sino credibilidad de sus propios seguidores que la verán oportunista y mezquina.

 

N.de la R. Por problemas en la planta impresora, la presente editorial aparecida en nuestra edición anterior no pudo leerse, razón por la cual la reiteramos.

 

 

Compartir