«No lo puedo creer…estoy emocionada, complacida, jamás pensé que ante un impulso como el que tuve, de escribirle al Ministro de Educación Alejandro Finocchiaro, iba a merecer su atención al punto de llamarme en forma personal. Cuando un asistente suyo me dijo «un momento le va a hablar el Ministro Finocchiaro», no lo podía creer, cuando me dirigió las primeras palabras me puse a llorar…»
Así le relató a El Oeste la maestra Marcela Rodríguez, del Jardín de Infantes de Bellocq, lo sucedido como consecuencia de un e-mail que le envió a la gobernadora Vidal y al Ministro Finocchiaro, con relación al paro docente y a su idea de revertir el problema de las excesivas y prolongadas licencias médicas.
-Ud. hizo paro Marcela?
-No, no lo hice porque considero que es un deber para mí como maestra el concurrir a la escuela y dar clase a mis alumnos. Y debo decirle que soy afiliada a la FEB, pero no estoy de acuerdo con el paro.
-Cuéntenos como es que se le ocurrió escribirle al ministro.
-En realidad yo le hice un mail a la gobernadora Vidal porque me sentí muy enojada porque no se pagaba el presentismo, o sea que se igualaba a quienes habían hecho paro y a quienes como yo fueron y dieron clase.
-Pero quien la llamó fue el ministro?
-Si, porque ella le giró el mail a Finocchiaro, fue él quien me llamó para felicitarme y mostrarme su satisfacción por el mail recibido. En el mismo yo le relaté la realidad de Bellocq, le comenté que era un pueblo pequeño que tenía problemas cada vez que llovía y que éramos nosotras las maestras que vivimos aquí quienes nos teníamos que hacer cargo de todos los días de mal tiempo.
-Qué más le dijo el ministro?
-Que la sugerencia que yo hacía sobre el tema del presentismo iba a ser tenida en cuenta por la gobernadora quien lo iba a anunciar. Yo no lo podía creer, lo mío fue un impulso, pensé que tal vez me pudieran contestar por la misma vía, pero jamás que me llamara el ministro en forma personal. El elogió el temperamento de aquellos que privilegiamos dar clase por sobre las medidas de fuerza, que pienso son injustas porque perjudicamos a los chicos.
-Y su posición no le trajo problemas con las docentes que hicieron huelga?
-Bueno…directamente nadie me dijo nada, pero sé que a muchos no les gustó, que me criticaron, así como otros me felicitaron y elogiaron mi posición. Debo decirle que mi hermana Mariela que es profesora también envío un e-mail, ambas pensamos igual. Me complace que la gente de este gobierno nos escuche, nos preste atención y se moleste en respondernos ante un pedido o una sugerencia. Le pasé al ministro con la directora Adriana Camorati a quien también felicitó, preguntándole sobre la marcha del jardín.
-Habló con el ministro de los salarios docentes?
-No, no hablamos de eso, aunque si él quiere saber cuanto gano no tiene más que poner mi nombre y lo sabe de inmediato.
-No hizo política el ministro en sus dichos?
-Un poco, pero es natural. Yo aproveché también para hacerle recordar nuestros constantes reclamos de una salida asfaltada hacia la ruta por el lado de Pehuajó . Que cada vez que llovía quedábamos aislados.
-Algo más Marcela?
-Sí, dos cosas, le envié otro mail al ministro pidiéndole disculpas por haberlo molestado y agradeciéndole su llamada. Y una pregunta: ¿cómo se enteraron?, porque yo traté de que no trascendiera.
-Secreto profesional… a El Oeste no se le escapa nada.