¿SERÁ COTILLÓN ELECCIONARIO O PODRÁ PROBARLO?
En momentos en que funcionarios del gobierno anterior y del actual son continuamente sospechados por corrupción, se inician investigaciones, algunas con éxito otras no, poco puede llamar la atención que en Casares se arrojen mantos de sospecha sobre funcionarios o políticos desde la oposición. Habrá que ver si realmente dichas sospechas tienen algún fundamento o si simplemente son parte del cotillón de la campaña eleccionaria que ya se ha iniciado.
PONONO ABRIÓ EL FUEGO
Y ha sido Oscar «Ponono» Quintana, concejal radical del bloque de Cambiemos, quién se desbocó a través de su sitio digital y en medios que recogieron sus dichos, sospechando por enriquecimiento ¿ilícito? al Secretario de Obras Públicas de la comuna Ing. Daniel Stadnik, una de las espadas del intendente Walter Torchio, quien toma la posta del gobierno comunal en ausencia de éste. En dichas acusaciones aporta elementos (detalla propiedades y demás bienes de Stadnik) a fin de demostrar el enriquecimiento que denuncia. Podría decirse que es un tiro al corazón de Torchio, pero quienes conocen al escribano o al menos su estilo de gobierno saben que está vacunado para estas contingencias y que así como les da a sus funcionarios total libertad para actuar y manifestarse, dejará que sea Stadnik que se defienda o que actúe la justicia si es que esa sospecha se convierte en algo concreto y no en humo de utilería preeleccionaria.
Dice «Ponono» que el patrimonio Stadnik ha crecido demasiado, que siempre ha vivido de sueldos oficiales y que por lo tanto deberá demostrar como lo obtuvo.
También mete en la bolsa de sus sospechas a legisladores locales, sin especificar nombre.