La cantidad de horas transcurridas, en realidad días, desde la desaparición del avión bimotor Mitsubishi en la zona del Delta bonaerense luego de haber partido desde el aeródromo internacional de San Fernando en dirección a Las Lomitas (Formosa), ha dado motivo a que se barajen distintas hipótesis, algunas muy distintas a las que sostienen los medios aeronáuticos y pilotos profesionales.
¿UN CUARTO
PASAJERO?
Una de esas hipótesis, de la que el propio diario Clarín se ha hecho eco, tiene que ver con la posibilidad de que haya un cuarto pasajero que viajaba en forma secreta, que no se acreditó y se embarcó desde una zona donde no existen cámaras que puedan haberlo detectado. Hablan incluso de alguien que quería abandonar el país en forma secreta, lo que abriría la posibilidad de que el avión no se accidentó y que sus pilotos, así dice la noticia apagaron las señales de la aeronave para no ser descubiertos. No obstante aclara la nota que todo está en el terreno de la especulación. Son versiones que suenan descabelladas y no se condicen con el pensamiento general de los que analizan el tema seriamente.
Otras versiones dicen que Vega, el piloto relacionado a Casares no tenia que hacer ese viaje, pero que su amigo Ronzano lo invitó. Respecto a su padre trabaja en la balanza de la firma Tomás, tiene el mejor de los conceptos con sus compañeros y se domicilia con su esposa en una quinta que posee la firma. Se supo también que el joven piloto estuvo de novio con una conocida jovencita de esta ciudad, pero esa relación se extinguió. Aquí venía muy seguido a visitar a sus padres y salía con amigos.