El problema hídrico en nuestro partido es serio, la zona rural está en emergencia, a los campos inundados de la zona sur se le están sumando los de la zona norte, y no para de llover. En algunas localidades ha llovido cerca de los 1000 mm. , crece la preocupación en los productores, muchos de los cuales no pueden llegar a sus campos. El Ing. Stadnik y el intendente han mantenido reuniones con los más afectados, por lo que Walter Torchio resolvió viajar a La Plata y mantener distintas reuniones en el Ministerio de Infraestructura para explicar en detalle la situación y la problemática que sufre Carlos Casares como consecuencia de las inundaciones.
Es de esperar que el gobierno de Vidal responda en consecuencia -así lo ha prometido- a fin de realizar las obras pertinentes para construir las defensas contra el avance del agua. Como para el cúmulo de trabajos se necesitan fondos, Torchio también acudió al Ministerio de Economía, obteniendo la promesa del propio ministro Hernán Lacunza para que adelante los dineros necesarios para poder concretar los trabajos pertinentes.
Las experiencias casarenses nos dicen que el avance de las aguas, si no se realizan las obras de contención, puede causar un verdadero desastre que ocasione pérdidas millonarias y el empobrecimiento del sector.
Desde la comuna se trabaja incesantemente para evitar el drama ya conocido y que tantos problemas ha ocasionado. Es de esperar que la madre natura ayude, pero también que funcione con los reflejos necesarios el gobierno provincial y el nacional si hiciera falta. Nada de colchones ni de leche en polvo, el problema -gracias a Dios- no pasa por ahí, lo que se necesitan son equipos viales trabajando hasta los domingos, que funcionen los canales y que se haga todo lo que haga falta para que escurran las aguas y los campos sigan produciendo.