A un PASO de su tercer mandato, Walter Torchio reafirmó su liderazgo imponiéndose por 2.544 sufragios, a la suma de los votos obtenidos por los dos precandidatos de Juntos por el CAMBIO.
Recibe el escribano el aval de la ciudadanía para gobernar 4 años más. Ante el juicio inapelable de los vecinos poco y nada queda para comentar.
En la interna de Juntos para el CAMBIO decir que fue no apta para cardíacos es poco, tanto Lucas como Andreoli fueron alternando la delantera y en un final en el que ambos se adjudicaban la punta, Maria Lucas de arremetida se quedó con el triunfo por 72 votos.





Las encuestas permitían presagiarlo, pero también la coincidencia de opiniones tanto de los politólogos de nuestra ciudad como de los vecinos en general, sea en lugares de trabajo, en mesas de café o en el seno familiar. Todo indicaba que para el intendente Torchio estas elecciones PASO iban a ser un trámite, que a menos que ocurra algo impensado, su victoria estaba cantada. Los números así lo mostraron, obteniendo el jefe comunal que aspira a un tercer mandato, 2.544 votos, marcando así un holgado triunfo sobre ambas fracciones de Juntos por el CAMBIO, e incluso superando la suma de las mismas (Lucas 2.769 votos y Andreoli 2.695 votos), por 5.464 sufragios.
La euforia vivida en el bunker de Frente para TODOS era indescriptible, no porque se tratara de una sorpresa, sino porque se festejaba la coronación de un proyecto cuya aceptación quedó reafirmada en las urnas.
LA INTERNA DE LA OPOSICIÓN
Tal vez por esa certeza ciudadana que era el triunfo del intendente Torchio, el verdadero interés de la contienda PASO estaba cifrado en la interna de la oposición, entre la lista 135 1 A AMARILLA que llevaba a la concejal María Lucas como precandidata a intendente y contaba con el apoyo del exsenador y exintendente Omar «Peli» Foglia, y la lista 135 3 A ROJO liderada por Raúl Andreoli presidente de la UCR local. Ambas fracciones y en especial la de Andreoli realizaron una movida y costosa campaña en el intento de sumar voluntades para lograr el triunfo y enfrentar con el candidato propio a la lista del intendente Torchio, quien habiendo conformado la unión de todas las fuerzas, evitó de esa manera la confrontación interna.
Con un amplio despliegue publicitario, visita de candidatos, ruidosas y multitudinarias reuniones de militantes y simpatizantes, Lucas y Andreoli llegaron a las PASO de ayer con cifradas esperanzas de triunfo. Y al respecto pudimos observar que las opiniones estaban muy repartidas, e incluso algunos llegaron a vaticinar que Raúl Andreoli podría dar la sorpresa. Pero como dijera el General, la única verdad es la realidad. Buen intento el del joven dirigente radical, que enfrente tenía una fuerza cimentada, con experiencia y cuadros políticos que conocieron de la victoria y oportunamente ocuparon el sitial del gobierno comunal. No obstante lo suyo no era una pelea contra los molinos de viento, ya que se apoyaba nada menos que en el radicalismo, que tuvo en nuestra ciudad y todo el partido épocas gloriosas en CARLOS CASARES.
FUE VERDADERAMENTE
el Frente de TODOS
Para usar la vieja frase de «La Unión hace la Fuerza», nunca mejor plasmada que en el comité de campaña de Torchio, donde todas las fuerzas del justicialismo estaban unidas y celebrando el holgado triunfo del oficialismo local. Un Frente de TODOS que mucho antes que se forme a nivel nacional, el intendente Torchio pregonaba en todos los reportajes que le hiciéramos, y que en esta oportunidad fue posible, sin resistencia alguna. Así se vió en la conformación de la lista, y ahora en el resultado de la votación. La unión fue monolítica y los resultados apabullantes. El liderazgo de Torchio, perecedero y contundente no dejaba lugar alguno para cuestionamientos. Los resultados le dieron un paso seguro el de las PASO, para reiterar su perfomance actual en las próximas generales de octubre.,
ALAGARABÍA SIN IGUAL EN EL LOCAL
JUSTICIALISTA
Como es de imaginar en el local de Frente de TODOS, completamente repleto de militantes, dirigentes y simpatizantes, la algarabía era total y el intendente Torchio el centro de todos los aplausos, abrazos, besos y felicitaciones, allí estaba su familia, sus amigos, los peronistas de la primera hora, no faltaba nadie. El estruendo era total, sonaban los acordes de la canción de campaña del intendente como así también la Marcha Peronista que todos cantaban. Era una verdadera fiesta, el apabullante,.sin intención alguna de menoscabar al partido Juntos por el CAMBIO y por usar un término futbolero, la diferencia entre el actual intendente con relación a las dos fracciones de Juntos por el CAMBIO, tenía sabor a paliza. Pero ojo, no es la primera vez que un boxeador al borde del nocaut se levanta y sigue en la pelea. Es por eso que como reza el popular dicho: «cocodrilo que se duerme, es cartera…»
