Jardinero infiel le robó alrededor de 250 mil pesos a una anciana
Detenido el autor se recuperó gran parte del dinero y lo que había comprado con el mismo
Conocida vecina de ésta fue objeto de un importante robo. El autor, que luego de una investigación policial fue detenido, resultó ser una persona que la damnificada ocupaba para mantenimiento de su casa. La cifra robada por cierto es muy importante, acaso todos los ahorros de la víctima, unos 250 mil pesos, que afortunadamente fueron recuperados en gran parte luego de una rápida investigación policial. El informe policial del ilicito es el siguiente.
SUSTRACCION DE DINERO (RECUPERADO)
Con fecha 29 del corriente mes y año, se toma conocimiento por parte del ciudadano GIANELLA HORACIO en carácter presentación de su progenitora, ciudadana JAUME SUSANA de 79 años de edad, que la misma desde hace varios días a la fecha le habían sustraído una suma importante de dinero, a raíz de averiguaciones practicadas por personal del servicio externo de esta comisaría se logró dar con el autor del hecho, tratándose del ciudadano ALARCON LUIS, mayor de edad, oriundo de esta ciudad, quien cumplía tareas de mantenimiento sobre el domicilio de la damnificada, recuperándose gran parte del dinero sustraído, como así también elementos adquiridos por el imputado con el dinero sustraído.- Para con el imputado el Magistrado de Intervención dispuso Notificación Art. 60 del C.P.P. y posterior libertad.- Intervención UFI n° 3, Dr ARCOMANO FABIO Departamento Judicial Trenque Lauquen.-
Fdo. Crio. RICARDO GIGLIOTTI – Jefe Policía Distrital Carlos Casares.-
Sub. Crio. ESPOSITO JOSE – Jefe Comisaria Carlos Casares.-
EL ROBO A SUSANA JAUME
Doble dolor: la pérdida económica y la traición a la confianza.
El Oeste entrevistó a Horacio Gianella, el conocido vecino, empleado del Banco Nación e hijo de la víctima.
“Lo quería como a un hijo”, nos decía muy consternado Horacio refiriéndose al ladrón.
Quienes conocemos a Susana sabemos de su bondad y del sacrificio que hizo en su vida, más aún después de su viudez para mantener a sus hijos. Trabajando como maes-tranza en el Instituto Juan XXIII, supo granjearse el cariño de todos sus compañeros. Ya jubilada, pensando en ahorrar dinero para atender sus necesidades de salud, comenzó a juntar peso tras peso.
En su casa, como también en la de Horacio, solía hacer tareas de mantenimiento Luis Alarcón; albañilería, pintura, jardinería y otros trabajos que la familia le pedía.
Lamentablemente, este trabajador no solo traicionó el concepto de trabajo, sino a quien “lo quería como un hijo”; a esa mujer que constantemente le brindaba ayuda y confianza.
Fue así que Alarcón descubrió dónde Susana guardaba sus ahorros y por medio de un ardid, la hizo quedarse en la vereda mientras él le robaba el dinero, camuflándolos en un balde de albañil.
La suma estimada era de 250.000 pesos, una fortuna para una jubilada y una cantidad muy importante para cualquiera.
Descubierto el hecho se realizó la denuncia y luego vino el terrible dolor en el alma que generó la confesión, por eso decimos “doble dolor”.
Susana solo pudo recuperar el 20 % de lo robado y continúa a la espera de las definiciones de la investigación policial.
El daño económico es muy grande, pero el dolor en el alma que la aqueja, debido a la traición del trabajador transformado en delincuente, es incurable.