Murió Mauro Viale
El país se conmovió ante la muerte de un periodista de raza que supo como ninguno captar el gusto del argentino medio, sin verter opiniones que causen malestar pero si poniendo énfasis en señalar todo aquello que podría dañar a los argentinos. Mauro Viale hacía un programa de lujo, con invitados especiales, sea prestigiosos analistas como encumbrados políticos para analizar y desmenuzar las implicancias de la peste que se había instalado entre nosotros como un despiadado verdugo que dejaba y deja dolor y muerte a su paso. Una peste a la que Mauro le tenía terror y no vacilaba en decirlo en su programa, así como esperaba ansioso su vacunación. Precisamente hace unos pocos días fue vacunado y lo comentó con alegría, calculando en cámara cuando sería la fecha en que recibiría la segunda dosis. Pero un par de días de haber recibido la vacuna se contagió de Covic 19, recibiendo una rápida atención, permaneciendo uno o dos días en terapia intensiva hasta que empezó a responder satisfactoriamente al tratamiento, siendo derivado a una habitación común para su recuperación definitiva. Pero un imprevisto derrumbó como un castillo de naipes todas las esperanzas. Un infarto fulminante le quitó la vida, para sorpresa y congoja de médicos y familiares, a los que se les fue de las manos en un abrir y cerrar de ojos. Mauro murió dejando dolor y consternación NACIONAL. No hubo televidentes, colegas, funcionarios, profesionales que no hablaran de él azorados por la noticia y el estupor. Y pasarán los días y se seguirá hablando de Mauro, el mejor, inolvidable respetado y querido. Un maestro del periodismo.