CASARES RECUPERÓ SU ÁNIMO
El ritmo es otro, la noche ha recobrado su dinámica, se respira otro aire
El Casares de las noches desiertas, de las calles vacías, de la ausencia de jóvenes y niños ha dado paso a otra dinámica. El tránsito se ha quintuplicado, hay otro ritmo, los jóvenes van de aquí para allá, los niños van al colegio, hay espectáculos públicos y la noche parece haberse encendido. Los restaurantes funcionan a lleno, las confiterías se ven concurridas, se escucha música y el clásico bullicio de los jóvenes. El “toque de queda”, por llamarlo de alguna manera ya es historia, el broche de oro lo marca la bailable y Casares ha vuelto a ser lo que era. El humor es otro, sería una lástima que la historia se repita, que la pandemia no se haya ido definitivamente. Confiemos que sí, que los resultados de la vacunación sean totales, que el fantasma haya desaparecido y podamos continuar con una vida plena y sana. No abusemos de las libertades, sigamos cuidándonos.