CASARES ES UN EJEMPLO DE CONVIVENCIA CON LA COMUNIDAD ISRAELITA
Ellos, junto a las comunidades italiana y española son parte del génesis que conformó nuestra identidad.
Conmovidos los casarenses no podemos comprender ese odio ancestral que impide la convivencia entre los israelitas y sus vecinos, al punto de que podemos decir que están en una guerra constante que desgarra las entrañas mismas de esas comunidades.
¡Qué distinto a lo nuestro!, aquí en Casares han convivido y conviven en perfecta armonía integrantes de las comunidades italiana, israelita y española, que puede decirse que conforman el génesis de nuestra identidad. Cada comunidad con sus tradiciones y su cultura, sus banderas junto a la argentina en la plaza San Martín, en una cabal demostración de hermandad. Con la comunidad israelita en especial la convivencia ha sido y es perfecta, los hijos de italianos y españoles han mezclado su sangre con la israelita y en algunos casos se han realizado ceremonias concelebradas para mantener vivas sus religiones. Y en los actos patrióticos su bandera, la de comunidad no ha dejado de estar presente, al igual que su participación en desfiles y otras ceremonias. Se ha dado el caso, o los casos en los que el cura párroco de nuestra ciudad ha ido al cementerio israelita a darle la bendición a un difunto. Con frecuencia los israelitas realizan en su hermoso Teatro Bristol actos con la participación de artistas conocidos o la presencia de mandatarios religiosos a los que han sido invitados vecinos de las otras comunidades. En una oportunidad un importante miembro de la comunidad israelita local realizó una cena en un conocido restaurante de Buenos Aires al que invitó a este cronista. Demás está decir que la mesa estaba poblada de importantes empresarios y conocidas personalidades israelitas. En un determinado momento uno de los invitados, director de una importante escuela israelita comenzó a hablar del antisemitismo dando a entender que toda la comunidad en algún momento lo manifestaba. El que escribe le dijo que al menos en nuestra comunidad, en la que viven cientos de judíos, la convivencia es perfecta. El hombre se mostró incrédulo, motivando que este cronista llame al realizador de la cena preguntándole: Dígame señor cuantos hijos tiene usted, “cuatro” contestó y seguramente casados y con hijos, cierto?, recibiendo como respuesta: “si, las tres mujeres y un varón, que me dieron 14 nietos”. ¿Todos casados con judíos?, a lo que el encuestado respondió, “no, todos casados con goy (no judíos). El director de la escuela cambió de tema.
Volviendo a la desgraciada situación que se vive en el golán y en toda esa zona, deseamos fervientemente que se depongan los odios y reine la paz.