La vejez como una oportunidad
En todo el mundo las personas viven más tiempo que antes. Se prevé que en 2050 el 25 por ciento de la población tendrá más de 60 años y a partir de 2030 se estima que habrá más mayores de 60 que menores de 14 años.
Estamos en la década del envejecimiento saludable, según la ONU es un período donde los Estados deben poner en la agenda política el cuidado de las personas mayores.
La ampliación de la esperanza de vida ofrece oportunidades, no solo para las personas mayores y sus familias, sino también para las sociedades en su conjunto; Es fundamental valorar al adulto mayor como la persona que es, por su sabiduría y experiencia.
Las personas mayores pueden emprender nuevas actividades, iniciar una nueva profesión, retomar antiguas aficiones, estudiar, viajar, etc. El alcance de esas oportunidades depende en gran medida de la salud, de que logren tener una buena calidad de vida, para eso es muy importante tomar medidas que apunten a mejorar el bienestar tanto físico, mental de la población adulta, generar espacios propicios donde puedan desarrollarse, el disponer de edificios, transportes públicos, teatro, cine, supermercados, remises seguros y accesibles, así como de lugares por los que sea fácil caminar, facilitar que los mayores puedan participar de actividades y generar oportunidades, el derecho a la salud, al desarrollo cultural, al trabajo para que puedan disfrutar de un envejecimiento saludable.
Debemos entre todos cuestionar los prejuicios sobre la vejez, aunar esfuerzos los gobiernos, la sociedad civil, los profesionales, colegios, los medios de comunicación, el sector privado para llevar a cabo acciones concretas que permitan promover vidas más largas y saludables; Y de esta manera hacer que los adultos mayores se sientan visibles, no invisibles, que se sientan incluidos, útiles en una sociedad que privilegia el ser joven, la velocidad, el consumo. Hay que reivindicar el valor de los adultos mayores como portadores de una memoria colectiva, una sabiduría vital y una capacidad crítica.
Hay que cambiar nuestra forma de pensar, actuar en relación con la edad, derribar los prejuicios y discriminación, desarrollar las comunidades de forma que se fomenten las capacidades de las personas mayores, prestar servicios de atención integrada y atención primaria de salud centrados en la persona, que respondan a las necesidades de las personas mayores y proporcionar acceso a la atención a largo plazo a las personas mayores que la necesiten.
Lic. Eliana Lujan Galante
Psicóloga Clínica
MN: 44968 / MP: 35377