Este espacio que con frecuencia se ocupa de las cosas que importan a los casarenses, suele perder la solemnidad cuando de distracciones se habla. Y un buen fin de semana junto al agua cristalina de una pileta de natación, el disfrute de un chapuzón en familia, y esas horas imperdibles en las que uno se desenchufa de los problemas cotidianos, no tienen precio.
Pero claro, si hay un complemento insustituible en esos fines de semana soñados, ese complemento es el asadito, una tradición tan nuestra que es imposible disociarla de nuestros mejores momentos. Pero… pareciera que siempre hay un pero, las parrillas del monte de San Esteban contiguo al balneario, están destruidas, de esos fogones que otrora se veían todos ocupados y humeantes, ya no queda nada. No es lo mismo reemplazar una jugosa tirita de asado, una morcilla o un chorizo por un módico sandwiche de salame y queso. Pero que se le va a hacer, esa es la realidad de hoy en día, que desde este lugar, solemnemente, pedimos que sea mejora-da. La reparación o en realidad construcción de esos fogones no representará seguramente una inversión demasiado honerosa como para que la oposición política del gobierno actual la considere un despilfarro. Ellos seguramente comerán también asado y seguramente también van a estar de acuerdo con este pedido, «argentino y popular».
Queda para analizar el porqué de esos fogones destruidos e inservibles. No se rompieron solos, ni desaparecieron las parrillas por arte de magia. Simplemente vecinos desaprensivos que no le dieron la dimensión de su valor, y lejos de cuidarlos dieron rienda suelta a sus afanes dañinos, perjudicando de esa manera a cientos de vecinos que disfrutaban de esa comodidades.
Sin el humo y el aroma de los riquísimos asados, a San Esteban pareciera que algo le falta. El construir nuevamente los fogones no será una obra de infraestructura urbana, ni tampoco una prioridad comunitaria, pero sin duda colmará de felicidad a aquellos que valoran el descanso de los fines de semana disfrutando de un asado en familia al aire libre.