Es evidente que a nadie le gusta que le toquen el bolsillo. «Para que voy a pagar 2 pesos de estacionamiento por hora si haciendo una cuadrita a pie me los ahorro», dicen los que antes anclaban sus vehículos en el radio céntrico. Las calles en las que antes no se podía conseguir un lugar para estacionar, ahora lucen como un día domingo, hay lugares para elegir. Los cobradores de la Avda. San Martín bostezan de aburridos porque sólamente tres o cuatro coches por cuadra se detienen animándose sus conductores a abonar la tarifa.
En realidad era eso lo que se perseguía, que el área céntrica se descongestione, para que estacione solamente aquel que debe realizar un trámite o una compra, y no los que trabajan en esa zona y dejaban sus vehículos toda la mañana. No obstante a medida que pase el tiempo muchos cederán y se convencerán que para estacionar hay que pagar, algo que no tenían en sus cálculos.