La ciudad se vió convulsionada por la ruidosa presencia de decenas de cupecitas del TC de antaño, algunas recicladas en forma espectacular y al detalle, emulando aquellas que marcaron una época brillante del automovilismo argentino, la de los hermos Gálvez, Marimón, el mismo Juan Manuel Fangio, los hermanos Emiliozzi, Rodolfo de Alzaga, Juan Manuel Bourdeu y tantos otros que dejaron su huella indeleble de pasión y coraje por las rutas de nuestro país.
El pasado fin de semana las Cupecitas del TC brindaron un homenaje al disputar el Gran Premio Roberto Mouras por caminos de nuestro partido. Más de 20 autos del Turismo de Carretera del ayer, se dieron cita en nuestra ciudad para homenajear al más grande deportista de Carlos Casares. A ellos se le sumaron los autos del TC del recuerdo de nuestra ciudad, totalizando unas 50 máquinas en las dos jornadas.
Dos etapas y mucha gente
Con mucho público a la vera del camino como ocurría en aquellas épocas, las cupecitas del TC se pusieron en marcha desde la Plaza San Martín hasta Moctezuma el sábado después del mediodía. Ahí mismo, en el acceso a la localidad donde nació Roberto Mouras y sobre el Monumento que lo recuerda se rindió un homenaje con la colocación de una plaqueta, donde el Intendente Walter Torchio dio la bienvenida a los pilotos en su mayoría del Gran Buenos Aires. Luego Rodolfo “Niky” Panet agradeció la presencia de la Agrupación y la predisposición del intendente para con el automovilismo del ayer. Hubo fotos y recuerdos de ambas agrupaciones. Por la tarde arribaron a nuestra ciudad, se estacionaron frente a la Iglesia Nuestra Señora del Carmen, se realizó una misa donde el padre Juan Pellegrino bendijo los autos participantes, con una visita al museo Roberto Mouras donde dejaron una placa recordatoria, y nuevamente los agradecimientos para los anfitriones y dueños de casa.
El domingo para el Sur del partido
El domingo por la mañana desde muy temprano, las máquinas con algunas bajas (por roturas) se pusieron en marcha con destino al sur de nuestro partido. Desde el camino a Cadret pasando por Ordoqui y hasta Hortensia donde hubo un receso de 2 horas con un refrigerio realizado por integrantes de la Escuela de aquella localidad y siguieron camino a Bellocq donde realizaron el tradicional almuerzo de camaradería. Luego de la sobremesa en caravana volvieron a nuestra ciudad donde tuvieron punto de llegada el Museo Roberto Mouras. Ahí fueron recibidos por autoridades del Museo y el hijo del inolvidable campeón, Roberto Mouras Ruvira, quién junto a su madre Viviana atendieron a los integrantes de la Agrupación de Cupecitas del TC agradeciendo el homenaje al más grande deportista de nuestra ciudad.