Los repetidos hechos de violencia familiar se han convertido en una preocupación de las autoridades policiales y judiciales, en virtud del giro a veces trágico que suelen tomar estas situaciones. Dichas denuncias implican mayoritaria-mente a maridos, concubi-nos y novios golpeadores. Como medida cautelar se dictan las llamadas órdenes de restricción a fin de evitar la repetición de éstos lamentables hechos, aunque existen en algunos casos marcadas desobediencias que obligan a las autoridades policiales y judiciales a actuar en consecuencia, procediendo a la detención de los infractores a dichas medidas.
CON LA JUEZA DE PAZ
El Oeste consultó sobre el tema a la Jueza de Paz Letrada Dra. Soledad Contre-ras, de quien en la Comisaría de la Mujer destacan su eficiente y rápido proceder ante denuncias de víctimas.
-Cómo es el panorama doctora?
-Es sin duda preocupante, la realidad es que entran al juzgado entre 30 y 40 denuncias mensuales. No todas tienen medidas de restricción, algunas tienen llamados de atención, intimaciones, porque convengamos no registran la gravedad que justifique una medida de otro tipo. Así como en muchos casos la intervención se justifica hemos visto que en otros hay como una especie de abuso, que pretenden medidas muy extremas, hay que tener mucho cuidado con eso…
Hay que trabajar con la familia para ver si realmente se trata de un hecho de violencia familiar, porque así como hay denuncias que son abusivas, hay situaciones muy enquis-tadas que cuesta que se denuncien, pero por ahí explotan ante un hecho muy grave, que analizado vemos que se repite en el tiempo, y entonces sí hay que tomar medidas muy serias y excluir a alguien. Pero en general la mayoría son intimaciones, y a veces hay cuestiones menores como molestias por teléfono, o esto de las redes sociales que ha hecho y hace estragos en las relaciones vinculares.
-Cuál es el objetivo del Juzgado en estos casos?
Lo que el Juzgado tiene como norte es que cuando se dicta una medida de restricción a un domicilio o a una persona concretamente, es porque hay un hecho importante o porque después de una intimación no se ha podido sostener con las partes eso.
Es una problemática que existe y tenemos los dos extremos, en el sentido que hay muchas denuncias por hechos menores, que ponen en funcionamiento a la Policía de la Mujer como al Juzgado, pero también tenemos el otro extremo de hechos mucho más graves, donde hay familias que vienen sufriendo por cuestiones de todo tipo, y allí sí se aplican medidas más severas y un trabajo más sostenido en el tiempo, donde la familia tiene que entregarse a un tratamiento psicológico o tomar una decisión familiar.
-Y hasta hubo algunos casos recientes que han terminado con una muerte…
-Exacto. Porque si bien hay muchas denuncias quizás de hechos menores, hay algunas que son de casos muy serios. En esas, por su cúmulo, no podemos descuidarnos, y la medida tiene que ser muy seria, preventiva de otros hechos más graves, ya que en algunos casos por no haber dictado una medida, aunque sea menor, puede suceder un hecho muy grave.
-En suma doctora, es como decía Ud. al comienzo, el tema es preocupante.
-Si, muy preocupante.
MÁS DE 185 DENUNCIAS POR VIOLENCIA FAMILIAR EN 7 MESES
Desde enero a agosto del corriente año, se formalizaron 46 denuncias en enero, 25 en febrero, 11 en marzo, 20 en abril, 23 en mayo, 30 en junio y 30 en julio, con un total de 185 denuncias, de las cuales alrededor del 80% han dado lugar a medidas de intimación, mientras que el 20% restante, unas 40 aproximadamente, han motivado medidas de restricción en virtud de la gravedad de la violencia, en circunstancias con amenazas de todo tipo incluso de muerte. Estas medidas se aplican por lo general por 6 meses pero pueden renovarse a un año o más según la gravedad de la situación.