Viendo el último análisis realizado por la Comisión Fiscalizadora de la Calidad del Agua, podríamos expresar nuestra satisfacción, ya que el agua que tomamos no tiene arsénico. Pero nuestra alegría nos durará poco, ya que ahora lo que tiene es aluminio y en un altísimo contenido, un 50% más de lo permitido por el Código Alimentario Argentino, lo que debe ponernos en alerta y exigir la corrección de esta nueva problemática, que parece una historia de nunca acabar.
La Comisión Fiscalizadora nos envía el siguiente papel:
Carlos Casares, 24-4-2012 CONDENADOS A TENER UN TÓXICO EN EL GUA
ÚLTIMO ANÁLISIS DE ARSÉNICO Y ALUMINIO
La muestra fue tomada el 23 de marzo en el domicilio del vecino Ricardo Mancinelli de la calle Brandsen 233 de nuestra ciudad, siendo los resultados los siguientes:
ARSÉNICO: No se detectó arsénico en la muestra. Referencia 10 microgramos por litro.
ALUMINIO: 290 microgramos por litro. Referencia 200 microgramos por litro.
El análisis lo hizo la Comisión Nacional de Energía Atómica.
Nota de la comisión: La planta de abatimiento de arsénico opera en Carlos Casares desde noviembre del 2006 y se usa desde entonces sales de aluminio para eliminar el arsénico, pero con el tiempo pudimos ver mediante análisis que el aluminio comenzó a pasar al agua que todos usamos para beber, hoy podemos ver que no hay arsénico, pero sigue habiendo aluminio en concentraciones variables que siempre superan lo permitido por el Código Alimentario Argentino. Técnicos de ABSA reconociendo el problema (que con el tiempo será preocupante) estuvieron en Casares probando nuevas sustancias que no contengan aluminio pero no hubo ningún avance.
Por lo tanto desde este lugar pedimos a las autoridades provinciales y municipales que se sumen a nuestro reclamo para que de una buena vez ABSA de solución a un tema que parece propio de una película de terror, teníamos un tóxico, luego tuvimos dos, ahora tenemos uno ¿es que siempre estaremos condenados a tener tóxicos en el agua que pagamos como agua potable?
Por cierto, no saquemos de la agenda de reclamos incumplidos: el adecuado y constante mantenimiento de la planta que costó millones de pesos a todos los bonaerenses, el purgado de los caños de la red, el transporte de los desechos de la planta a donde corresponde, la falta de agua en invierno y en verano, las pérdidas en toda la red incluídos los acueductos entre ciudades, el arreglo definitivo de muchos tramos de la red de cloacas y la creación de una planta de desechos cloacales acorde a los tiempos que vivimos.
COMISIÓN FISCALIZADORA ABSA ANUNCIA UN AUMENTO DEL 180%
Y como si fuera una burla acaso macabra, la empresa ABSA que nos provee el agua presuntamente potable, aumentará la tarifa del servicio en un 180% a partir del 1º de junio, por lo que los usuarios deberán pagar casi el triple de lo que abonan en la actualidad.
El gobierno bonaerense en su afán de cerrar las cuentas públicas está echando mano al aumento de sus impuestos y servicios, como así también la eliminación de exenciones tributarias. La noticia ha motivado que varios intendentes bonaerenses (Battistella de 9 de Julio fue de los primeros), hayan puesto el grito en el cielo, oponiéndose firmemente al fuerte aumento, por entender que antes de aumentar primero ABSA debe ofrecer agua potable, libre de elementos que como el arsénico y el aluminio están matando a la población. Veremos que hace la comunidad casarense ante este verdadero atropello.