Sin la más mínima intención de alarmar y con la seriedad que el caso impone, hemos sido partícipes de un trascendido emanado de una fuente confiable y responsable. Dicha fuente hablaba con cierta preocupación del incremento de casos de HIV/SIDA, especialmente en jóvenes de corta edad, lo que reflejaría que en los jóvenes no existe prevención, y dicho incremento en los casos comprobados podría traer un efecto multiplicador no deseado. Nos detendremos aquí, para tratar de averiguar más y con mayores precisiones. Si bien es cierto que gracias a los adelantos de la ciencia los tratamientos con antirretroviricus en las personas HIV positivas les permite vivir más y en mejor estado de salud, el HIV/SIDA sigue siendo, según la Organización Mundial de la Salud uno de los más grandes problemas de salud pública del mundo.
Es de esperar que de ser cierta la versión aludida, se extremen las medidas para tratar de contrarrestar los efectos con campañas de concientización y medidas concretas para evitar el aumento de infectados.