En repetidas oportunidades, algunas con cierta ironía, hicimos notar la poca atención que el gobernador de la provincia, Daniel Scioli, le dispensara a Carlos Casares. Fueron varias las promesas, en algún momento se descontó su visita, pero siempre una excusa o un motivo abortaron la misma.
Finalmente y por primera vez en su condición de gobernador (lo había hecho como vicepresidente de la Nación), Daniel Scioli vino a Carlos Casares. Tal vez no en forma exclusiva, sino a participar de una reunión del CODENOBA y para promocionar junto al titular del Grupo Bapro Santiago Montoya, las nuevas herramientas para la gestión pública con las que cuenta la institución. Scioli distinguió a Carlos Casares al elegirlo para dicha reunión, lo que no deja de ser una muy buena señal que rinda frutos en un futuro inmediato. Se descuenta que el gobernador fue impuesto de las distintas problemáticas por las que enfrenta Carlos Casares y la región, como así también de las necesidades más inmediatas en el orden local.
No puede desconocerse la difícil situación económica por la que atraviesa la provincia de Buenos Aires, al punto de haber realizado recortes en la coparticipación a los municipios, afectando en forma considerable su economía. El caso de Carlos Casares es un ejemplo, dado que nuestro municipio se ha visto perjudicado en alrededor de un 18% de su presupuesto, lo que prácticamente obligó a replantear el proyecto comunal y ceñirse únicamente a las necesidades básicas, retrasando obras fundamentales que hacen al crecimiento y al desarrollo de una comunidad.
Pero, como decíamos en párrafo anterior, Scioli -nos consta- llevó en su agenda una serie de reclamos para los cuales prometió una solución, y a su vez alternativas de ayuda para paliar el recorte a la coparticipación que tanto afecta a la comuna local.
Es de esperar por lo tanto, que fuera de su presencia, siempre reclamaba y válida, el gobernador Scioli atienda las necesidades casarenses, poniendo a nuestro partido en sintonía con los partidos vecinos, que a luces vista se han sentido favorecidos con importantes obras públicas con las que Carlos Casares no cuenta, y que tienen que ver con la seguridad, la salud, accesos, rotondas, iluminación, viviendas y otras.
