Era clavado. Carlos Casares no podía estar al margen del hecho policial que tiene en vilo al país, la fuga y posterior raid a tiro limpio de los acusados por el denominado “Triple Asesinato de Gral. Rodríguez”, los hermanos Martín y Cristian Lanatta y Víctor Schillaci.
Precisamente este último, años atrás, mientras desarrollaba su profesión de platero, visitó asiduamente nuestra ciudad, proveyendo cuchillos y elementos de platería a talabartería, bazares y algunos particulares, siendo recordado por quienes lo trataron. Incluso se comenta que con algunos vecinos entabló cierta amistad.
Al conocerse esta noticia en Casares, y trascender que los prófugos podían merodear por estos pagos, comenzó a cundir entre muchos vecinos la preocupación de que en su permanente huida, Schillaci y sus compinches intenten ocultarse por esta zona, ya que evidentemente la conocen. Hasta ahora el hecho de que venían para aquí ha sido una falsa alarma, ya que al parecer andan por tierras santafesinas burlándose de un verdadero ejército que no logra atraparlos, al mejor estilo de las películas norteamericanas tipo «Enemigos Públicos» del famoso actor Johnny Depp. Ojalá las fuerzas de seguridad puedan capturarlos en forma urgente, pero por las dudas conviene estar muy atentos y con los ojos bien abiertos.