La muerte de un joven de 20 años, es siempre conmovedora, acaso inexplicable, pero el destino suele dar esos golpes, solo atribuibles a que Dios lo quiso así. En el hospital falleció en el día de ayer Leandro David Martínez, aquejado de una grave enfermedad, cuando recién comenzaba a dar sus primeros pasos por la vida.
A su acongojada familia vaya nuestro sentido pésame.