Tal como adelantáramos luego del 10 de diciembre el intendente Torchio tenía pensado anunciar distintos cambios en su gabinete, los que si bien aún no los confirmó, los trascendidos parecen ser ciertos.
En el hospital se sabe que el director Maximiliano Bentancor ha resuelto dedicarse a la actividad privada y por lo tanto renunciará. A nivel del D.E intentaron que deponga su decisión, atento a que lo consideran un funcionario valioso, pero es evidente que los trascendidos respecto a problemas internos y a la postura que tomó el personal y algunos colegas, se resistió al manoseo (así lo dijo un habitante del piso alto del municipio), y por lo tanto se alejará de la dirección hospitalaria. Hasta el momento no se ha anunciado en firme ningún reemplazante. En cuanto a la Administradora Graciela Domingo, protagonista de esta historia de dimes y diretes con relación a las diferencias que mantuviera con Bentancor, pidió licencia, se toma un tiempo y decidirá si se reincorpora en otro cargo del sistema de salud. A Walter Torchio le interesa conservarla en su staff. El ex-concejal Leandro Madera irá a Discapacidad, Vannina González como subsecretaria de Juventud y Arte o una denominación similar, y José María «Tati» Arrillaga de Acción Social al CIC, y en Acción Social Celeste Novillo y Vanesa Carballo con la supervisión de Arrillaga. Edgardo Vivono dejaría la jefatura de inspección quedando al frente de la oficina Norma Elola. Ya habíamos adelantado también que José Luis Perinasso dejaría Participación Ciudadana, María Laura Ibañez, Gestión Educativa, Leo García asumiría como concejal y en cuanto a Juan Ibarra iría al corralón y se haría cargo del CEPROC y Espacios Verdes.
No son cambios sustan-tivos, sino más bien un maquillaje en el gabinete, intentando oxigenar algunas áreas, buscando optimizar otras, pero nada que mueva al asombro. Lo del hospital es lo importante.
MÉDICOS QUE SE LADRAN…
Mensajes de solidaridad y adhesión a Graciela Domingo escritos por médicos en sus sitios de facebook dejan ver entre líneas ciertos resquemores entre colegas, algo que no deja de llamar la atención. Antes cuando un médico estaba en problemas el espíritu de cuerpo estaba presente, se defendían a capa y espada. Ahora en cambio parece que se ladran…