Parafraseando al famoso y excéntrico árbitro de fútbol (f) Guillermo Nimo cuyo asesor Pirincho le proporcionaba jugosas primicias, podríamos decir que un selecto informante dentro de PRO nos ha revelado algunas estrategias del partido de Macri-Vidal que integra la coalición gobernante Cambiemos.
Por principio, no sólo en Casares sino en todos lados quieren entronar en las intendencias a militantes puros de PRO. En Casares el candidato, o en este caso «la» candidata tiene nombre propio y se llama María Lucas, actual concejal electa. A ella apuntan sus correligionarios, la están midiendo y le pondrán todos los porotos. Pero si algo fallara tienen otra carta, que sería un candidato del riñón de Lisandro Perotti, mano derecha y Jefe de Gabinete del Ministro de Transporte de la Nación Guillermo Dietrich, un hombre que acompaña a Macri desde que era Jefe de la Ciudad. Se dice que Perotti o bien podría bajar al distrito, algo que muchos dudan, o de lo contrario tener «in pectore» al candidato.
De los socios del PRO específicamente de los radicales poco y nada se habla, serían una opción lejana, como también de Peli Foglia, pese a que lejos sería el que mejor mide, pero hay algo que no les convence. Lo ven demasiado glotón, tienen miedo que se les quede con todo.
Queda flotando un viejo anhelo, casi un desafío pese a intentos fallidos de Vidal y otros altos funcionarios PRO, si es que el intendente Torchio se decide a desempolvar su Junta Vecinal. ¿Una locura?, tal vez sí, tal vez no, la convocatoria peronista que hizo no los impresiona, todavía sueñan seducirlo.