En cambio otros no se pueden quejar, venden bien y sortean la malaria general.
La inflación que no para, los costos fijos que crecen de manera impresionante y las cargas sociales hacen que el comercio y en este caso el local tampoco se salvan, y tambaleen a punto de caerse.
Nos decía un conocido comerciante local que ya no da más, que los gastos fijos, los alquileres y las cargas sociales (tiene dos empleados) le destruyen la rentabilidad y está a punto de tirar la toalla, Situación similar viven decenas de comerciantes locales, kioscos que cierran, nuevas empresas a punto de naufragar, todo en un panorama incierto que se agrava día a día.
SIN EMBARGO OTROS NO PUEDEN DECIR LO MISMO
Entrevistamos a cinco o seis comerciantes, cuatro de ellos nos dieron el panorama que señalamos al comienzo de la nota, pero los dos restantes manifestaron que dentro de todo están soportando la situación de recesión que se observa y si bien no les es ajeno el problema de los costos fijos y gastos de personal, no pasan apremios, están capeando el temporal, aunque reconocen que las ventas han bajado ostensiblemente. Claro que estos dos comercios no pagan alquiler, son propietarios del local en el cual están instalados, y por lo tanto los gastos son menores.