Se viven tiempos difíciles, la economía se está cayendo a pedazos, hay desempleo, las empresas recortan gastos, y algunas cierran sus puertas o se achican para no tener que hacerlo, ya que la recesión es tan grande que no pueden hacer frente a los enormes gastos, entre los cuales los altos alquileres, sueldos y cargas sociales, los servicios y otros ponen en rojo sus cuentas.
Trascendió, y no deja de ser eso, tan sólo un trascendido, que una importante firma de electrodomésticos con sucursal en Carlos Casares podría cerrar las puertas de la misma, agobiada precisamente por la causas detalladas. Una versión dice que estarían avisando a los clientes que tomaron créditos en cuotas, que en el futuro deberán abonarlas en la sucursal de una ciudad vecina. Fuentes cercanas a la empresa niegan rotundamente la especie pero reconocen que el rumor circula.
Por el momento nada se sabe en forma oficial y es de esperar que no sea veraz, pero cuando el río suena…