del “Día de la Raza” al “Día del Respeto a la Diversidad Cultural”
El 4 de octubre de 1917 el presidente Hipólito Yrigoyen establecía por decreto que el 12 de Octubre se celebraría el Día de la Raza. Con esto se pretendía un acercamiento a España, teniendo en cuenta no solo el concepto de “Descubrimiento de América”, sino también el acercamiento a los miles y miles de inmigrantes españoles que arribaron al país a fines del siglo XIX y principios del XX. Además, era una manera de mostrarle al poder anglosajón norteamericano la presencia de la hispanidad y el catolicismo en estas latitudes.
Fue así que la bibliografía utilizada en las escuelas reivindicó el heroísmo de los “descubridores” y la figura de Cristóbal Colón, poniendo énfasis en un enfoque racista donde la lengua, la religión y la cultura hispana eran consideradas las únicas dominantes, descalificando lo atinente al indige-nismo y a los afrodescen-dientes, que en América eran millones.
Así pasaron los años y quienes cursamos la escuela primaria y secundaria entre aquella época y los años setenta, nos formamos con ese concepto, vale decir, la idea de una “raza” dominante, obviamente blanca y cristiana.
Por lo tanto cada 12 de Octubre era celebrado con festejos, donde, principalmente los descendientes de españoles mostraban su algarabía
Tiempos de cambio
Pero la década del 70 nos plantearía a los que amamos la historia y nuestro suelo, nuevos paradigmas. Los antropólogos, sociólogos e historiadores con fuerte influencia de las comunidades de pueblos originarios comenzaron a debatir y ganar cada vez más espacio, no solo en la intelec-tualidad, sino en la política y en la población en general, con el concepto de “diversidad cultural”, para reemplazar al anacrónico de “raza”.
La dictadura cívico-militar que asaltó el poder en 1976, puso un freno teñido de sangre a quienes replanteaban el estudio de la historia a través de su revisión crítica. Pero el retorno de la democracia reavivó el debate y la reforma constitucional de 1994, incluyó en el inciso 17 del artículo 75, el reconocimiento de la preexistencia étnica de los pueblos originarios.
A partir de allí, los libros y manuales escolares refor-mularon sus contenidos. Fue entonces que comenzaron a visibilizarse las culturas ocultadas adrede por la historiografía oficial dominante hasta ese momento y que el tal “descubrimiento”, no fue más que el inicio de la “conquista y colonización” del nuevo territorio.
No sólo eso, también ganaron espacio las lenguas de los pueblos originarios, contempladas en el concepto de bilingüidad en escuelas cercanas a las comunidades aborígenes.
Por tal motivo desde el 2010, el 12 de Octubre es el “Día del Respeto a la Diversidad Cultural”, dejándose de lado el concepto de “raza”.
No obstante, hay mucho trabajo para realizar tanto en las escuelas como en la política, los medios de comunicación y la sociedad en general, habida cuenta del rebrote racista y discri-minatorio que se puede ver en varios países del mundo, principalmente en los supuestamente “desarrollados”.
Escribe:
Prof. Daniel Lombardo Especial para El Oeste