Fue una decisión política necesaria a pesar de las adversidades del momento.
El camino iniciado el 25 de Mayo de 1810 con el grito de Libertad, debía consolidarse políticamente con la Declaración de la Independencia.
El Congreso de Tucumán fue el escenario para tomar semejante determinación y como antes mencioné, las dificultades eran varias y muy difíciles de superar.
Fernando VII quería revancha
El rey de España , Fernando VII, había retornado al trono después de la caída de Napoleón en Waterloo y estaba decidido a recuperar las colonias perdidas, por lo tanto se hacía necesario consolidar la decisión emancipadora a través de los ejércitos libertadores. Esta sería la postura del General José de San Martín para llevar adelante la epopeya del cruce de Los Andes y liberar Chile y Perú.
Las Provincias desunidas
Por otro lado las Provincias Unidas no estaban tan unidas porque las del Litoral, acaudilladas por Artigas, no participaban del Congreso de Tucumán ya que se habían reunido por su cuenta en el Congreso de los Pueblos Libres.
Se declaró la Independencia y San Martín la bancó con su ejército
No obstante, ante esas dificultades y otras más, el 9 de Julio de 1816 , el Congreso de Tucumán declaró la “Independencia de las Provincias Unidas del Sur, de Fernando VII, sus sucesores y metrópoli”, agregándosele días después “y de toda otra dominación extranjera”, ante las versiones de pedidos de protectorado a otras potencias europeas.
De esta manera, el general San Martín contó con el respaldo político necesario para llevar adelante su campaña libertadora.
Prof. Daniel Lombardo