Un pequeño aviso publicado en nuestra edición del sábado ppdo. tuvo el mismo efecto que si hubiera ocupado una página. En dicho aviso el municipio solicita empleados para recolección de residuos, especificando que los interesados debían dirigirse al Corralón Municipal.
Curiosamente para muchos observadores, dicha solicitud contrastaba con las propias declaraciones del intendente formuladas en El Oeste, quien refiriéndose a la situación salarial de los empleados municipales, manifestó que no es responsable de que en las gestiones que lo precedieron, se haya aumentado el plantel de empleados de 500 a 1200.
Por redes sociales y distintos medios se difundieron variadas críticas.
Tales observadores estimaban que si lo que sobran en la comuna son empleados, porque no destina una parte de ellos para cubrir las necesidades en el área de recolección de residuos.
Y aquí cabe la pregunta del título de esta nota: «Los empleados municipales, ¿son todo terreno?». ¿Puede el intendente enviar a un empleado de contaduría, a un chofer, a un ordenanza o a un agente de la Guardia Urbana a cumplir tareas de recolector de residuos?. ¿O a un recolector de residuos a cumplir trabajos que nunca realizó, para los cuales no está preparado?. Al criterio de muchas personas consultadas estas consideran que puede hacerlo a menos que se trate de personal que por razones de salud, género, edad u otros problemas no están capacitados para cubrir determinados cargos, o si se pretende cambiar de funciones a técnicos o profesionales que ocupan labores específicas.
El sentido común pareciera decir otra cosa. Tal vez en otros tiempos la «porca política» generó situaciones odiosas como la de enviar a un empleado de contaduría al matadero municipal, o de inspección o el hospital a prestar servicios a las delegaciones de Hortensia, Ordoqui o Smith. Se hacía eso para que se vayan, era cruel, insensato, la peor manera de castigar a un empleado por el hecho de adherir a un partido político adversario.
Sin pretender de manera alguna hacer diferencias en cuanto a las capacidades laborales de las personas, está claro que existen áreas específicas de la comuna a las cuales no puede enviarse a cualquier empleado.