Un acontecimiento único, irrepetible y maravilloso vivió el pasado fin de semana la comunidad de Bellocq, celebrando sus 100 años.
Más de 700 personas disfrutaron y participaron de los actos conmemorativos que se desarrollaron durante toda la jornada del sábado 8 de diciembre, los que en realidad habían comenzado en la víspera, con distintos actos organizados por la Comisión Pro Templo.
Los actos contaron con la presencia del Intendente municipal Esc. Walter Torchio, funcionarios, concejales, vecinos, ex residentes, todo en un marco de emotividad, alegría y reencuentros plagados de hermosos recuerdos.
LAS ACTIVIDADES
Las actividades previstas para celebrar el aniversario fundacional comenzaron en horas de la mañana con la apertura del museo y la inauguración del monolito del Centenario, una obra que de ahora en más será el espejo que reflejará su ejemplo y su orgullo de ser localidad centenaria.
MUSICA, DISCURSOS E IMPOSICION DEL NOMBRE A LA PLAZA
A partir de las 18 horas tuvieron lugar los actos oficiales conmemorativos en la plaza principal, que comenzaron con la excelente participación de la Banda municipal de Niños de la ciudad de Pehuajó, bajo la Dirección de la Prof. Mariana Larrubia.
Los discursos estuvieron a cargo de Oscar “Poroto” Merelli, el vecino belloquense con mayor edad, el delegado de la localidad Sr. Norberto Pagella, cerrando la parte protocolar de los discursos el Intendente Municipal Esc. Walter Torchio.
El festejo por el centenario fue la especial ocasión para imponer el nombre a la plaza, que de ahora en más llevará el nombre de “Pedro Gatto”, en homenaje a un destacado y recordado vecino.
PRESENTES, PREMIOS Y DESFILE
Además se entregaron sendos presentes a los descendientes del fundador del pueblo, como así también a las personas que trabajaron al frente de la delegación, a los niños ganadores del concurso literario organizado para esta tan especial ocasión y a los que obtuvieron el primer premio por el diseño del logo del centenario.
Finalizados los actos en la ahora plaza “Pedro Gatto” tuvo lugar el desfile por el boulevard de la Iglesia Santa María del cual participaron numerosas instituciones sociales y deportivas de la localidad
LIBRO HISTORICO, FUEGOS ARTIFICIALES Y CENA SHOW
Un hecho muy esperado y emotivo fue cuando se extrajo del monolito, construido en ocasión del aniversario Nº 80 de la localidad, un libro donde los habitantes de Bellocq dejaron expresados en aquella fecha los deseos para con su querido terruño, y donde además se incorporaron recortes periodísticos referidos a dicha fecha.
Este ejemplar verdaderamente histórico le fue entregado al Museo local para su conservación y para que lo pueda disfrutar toda la comunidad belloquense que podrá ver, seguramente con emoción, los conceptos vertidos por familiares y amigos hace 20 años y que ahora verán la luz.
En las instalaciones del polideportivo, donde tuvo lugar la feria de artesanos, todos los presentes disfrutaron de una espectacular función de fuegos artificiales.
El broche de oro para tan especial y sentida celebración lo constituyó la gran Cena show, en un salón prácticamente desbordado de público donde a la excelente cena se le debe sumar los shows que los presentes disfrutaron a pleno. Así pasaron por el escenario el Ballet Folklórico que dirige el Prof. Fabián Lucero, el grupo “Chocolate” y Carlos R. Fernández “El Chacarero Cantor”.
Sin lugar a dudas que Bellocq vivió una velada de excepción con la celebración de su centenario. Con sobriedad, la situación por todos conocida de la región no daba para tirar la casa por la ventana, pero dio muestras de una pasión y un amor por su terruño digno de todo elogio, algo que se necesita para superar cualquier inconveniente. Ya tienen 100 años y muy bien pueden lograrlo.
Los descendientes de la Familia Bellocq visitaron su tierra.
La quinta y sexta generación del matrimonio de Maria Larramendy y Juan Bellocq estuvieron presentes en la celebración del centenario de Bellocq, el día sábado 8 de diciembre, por iniciativa de Federico Pagella luego de un arduo trabajo en busca de descendientes e investigación de la historia de esta gran familia que no solo dejó un pedazo de tierra fértil sino el interés de un hijo de Bellocq que se preocupó por buscarlos y demostrarles a ellos dicho amor que tiene por su pueblo.
Se hicieron presentes Emilia, Bellocq bisnieta del matrimonio fundador quien con gran alegría visitó la comunidad recorriendo lugares históricos en donde se dio el puntapié inicial como la Estación del Ferrocarril y la Iglesia Santa María, esa emoción de recorrer los pasos que su bisabuela había trazado hace más de 100 años atrás.
Además estuvieron presentes Horacio, Eduardo y Juan Bellocq quienes compartieron los festejos del centenario, todos unidos ante un solo motivo: recordar a los fundadores.
Federico los recibió con una gran alegría, según sus palabras había cumplido un sueño y se notaba en cada palabra y en sus ojos, compartió con ellos un día de puros recuerdos y anécdotas, fue el guía durante toda la jornada, entre otros lugares recorrieron el Monumento que se realizó por iniciativa de la vecina Tany Ilardo en donde se recordó a los fundadores, la Iglesia Santa María y el Museo Sergio P. Ábalos en donde fueron recibidos con gran alegría.
Luego, en el acto oficial allí se los vio emocionados, una familia que se cruzó en la historia de un pueblo pujante que a pesar de la adversidad por las inundaciones pudo resaltar su pujanza, allí se cruzaron con Federico y la historia, un complemento perfecto para resaltar 100 años desde el inicio de la obra de María Larramendy.
La Municipalidad de Carlos Casares le entregó un certificado a la familia Bellocq en el acto formal, mientras tanto que la Comisión Pro Templo de la Iglesia Santa María un cuadro a cada descendiente con la imagen de la Iglesia Santa María y una inscripción agradeciendo la donación de la tierra y el recuerdo a María y Juan.
Fue la emoción más grande, cumplir un sueño y tener allí a los descendientes de esta familia que entregó su preciado capital para que la gente tenga oportunidades de vida, dieron su tierra, y sus hermosas edificaciones que hoy la comunidad de Bellocq atesora.
La Familia Bellocq agradeció en primer lugar el recibimiento y atención de Federico quien dedicó gran parte de su tiempo a ellos, además de haberlos invitado, porque sin dudas esto fue un logro de él, todos los descendientes prometieron volver pero no solo ellos sino todas las ramas, luego de 100 años volvieron a casa y la emoción hizo aflorar la nostalgia.