Como lo venimos consignando en anteriores ediciones, la Escuela Nº 15 “ Gabriela Mistral” de Santo Tomás, está preparando los festejos por su 75 aniversario, organizando una serie de actividades que tendrán lugar el 13 de octubre, las cuales concluirán con el almuerzo aniversario, cuyas tarjetas ya se encuentran a la venta.
Mas allá de los preparativos, para lo cual se ha formado una Comisión cuyo presidente es el Sr. Carlos Salvi, son muchos los que colaboran, de una manera u otra, para que estos festejos tengan el brillo que la escuela y su rica historia se merecen.
Entre ellos encontramos a dos ex directoras, la Sra. Eva María Serrani quien tuvo ese cargo durante 21 años y la Sra. Marta Miguel, quienes nos hablan de su paso por la escuela haciéndonos una breve reseña de su inolvidable vivencia en la misma.
Eva María Serrani
Cuando empecé en la escuela había más de 30 chicos pero luego, con el tema de la inundación y la falta de Jardín de Infantes empezó a desgranarse el tema de la matrícula, hasta este momento en que hay muy pocos chicos. Se pidió en reiteradas oportunidades el Jardín de Infantes y al no lograrse, muchos padres que llevaban a la escuela chicos más grandecitos y tenían los chiquititos para jardín, qué hacían… retiraban al grande y, o lo traían a Casares o lo llevaban a Guanaco donde había Jardín, algo que después se logró pero los chicos que se fueron se fueron…
Cuando comenzamos éramos dos docentes, luego tres y terminé el grado directivo sola, con varios grados, con cada vez menos alumnos…fue terrible para mí ver como se iba quedando sin alumnos… pero bueno, no quedaba más nada por hacer. Igualmente siguió la escuela y hoy está hermosísima, divina, mucho mejor que en mi época. Uno ahora ve como está todo el edificio, ve todo el personal, que ahora tienen portera porque en mi época no había así que nosotros preparábamos la leche, prendíamos las estufas, hacíamos de todo, hasta de enfermeras…
Fue una época muy linda de todos modos y de la que guardo el mejor de los recuerdos.
Marta Miguel
El tiempo para mi fue breve dentro de la escuela pero muy intenso lo que viví. Yo venía de otra comunidad rural y me encontré con una hermosa comunidad educativa, donde no solo era la escuela, los alumnos y las maestras, eran todas las familias, aún no teniendo hijos en la escuela.
Todas las escuelas rurales tienen una característica especial y es que todos están pendientes de la escuela…me acuerdo de las tortas que nos hacía la Sra. de Zermoglio para las fiestas, como Rafaelli que cada vez que nos encajábamos iba con una cuerda y nos sacaba…son anécdotas, recuerdos inolvidables.
Fue, como decía Eva, una etapa maravillosa y este reencuentro es para mí muy importante y para todos porque los reencuentros no surgen así porque sí. La escuela si cumple 75 años, pero está la otra parte, la parte humana donde a uno le parece que va a hablar del pasado y ese pasado de pronto se convierte en presente, comenzamos a reconocernos y todos nos enriquecemos: los que fueron nuestros alumnos, las familias, los hijos, los que colaboraron.
Este reencuentro nos va a enriquecer a ellos y a nosotros, porque ese pasado se va hacer presente y se va hacer futuro.”
