Días pasados, el 30 de agosto, dejó de existir en el hospital donde se encontraba internado, el apreciado y conocido vecino Enrique Marcelo Piñol, un hombre que supo granjearse sinceros afectos en su vida de relación, distinguido por su honestidad y hombría de bien.
En varias oportunidades y por distintas causas El Oeste le realizó a Enrique Piñol algunas notas, la última de ellas casualmente apenas un mes atrás. Dábamos cuenta que Piñol había resultado favorecido con un automóvil 0 km. de la Megarifa de Las Parejas (Sta. Fe) que le fuera vendida por el vecino Vicentito Tallarico. A los pocos días de haber recibido esa alegría, Piñol fue internado en el hospital víctima de una seria dolencia. Menos de un mes después se produjo su lamentable fallecimiento.
La vida tiene esas cosas… Don Enrique Piñol no pudo disfrutar ese flamante auto que seguramente cuando compró la rifa, soñó con ser uno de los favorecidos. El destino es así, uno propone y Dios dispone.